Alanna Batista: “Si tú puedes, yo también, no importa la situación o circunstancia”
Por: Tiffany Rodríguez
Alanna Daniela Batista Acevedo siempre soñó con ser psicóloga y, a sus 17 años, un hada madrina llamada Francina Hungría le hizo ese sueño realidad. A través de su Fundación, la egresada destacada del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), le otorgó una beca para que pudiera estudiar Psicología en la que también fue su universidad.
Así es como en el trimestre agosto-octubre 2020, Alanna inició sus estudios en la Colmena. Esta joven que forma parte de la comunidad con baja visión de la República Dominicana, debido a un tumor que le afecta el nervio óptico, ha encontrado en el INTEC el espacio para cumplir sus sueños. Con ella conversamos de sus expectativas sobre su vida como universitaria.
¿QUIÉN ES ALANNA BATISTA, CÓMO TE DESCRIBIRÍAS? Soy una joven de 17 años de edad, oriunda de Santo Domingo. Me considero una persona responsable, honesta, humilde y sociable, alegre, interactiva y especial. Me gusta leer, cantar, bailar, compartir, la cultura y socializar.
¿CUÁLES SON TUS EXPECTATIVAS ANTE TU NUEVA VIDA COMO UNIVERSITARIA? Mis expectativas con esta carrera es lograr, con Dios por delante, prepararme para ser grande en la vida, adquirir muchos conocimientos, graduarme, ser una profesional, ayudar a mi madre y a quienes lo necesiten.
¿POR QUÉ INTEC? Nunca me imaginé estudiar en esta universidad, pero gracias a Dios me han dado esta oportunidad, a través de la Fundación de Francina Hungría. Espero poder dar lo mejor de mí, cumplir con mis expectativas y con el nivel de excelencia de la universidad.
¿CÓMO HA SIDO TU PROCESO DE INDUCCIÓN EN LA UNIVERSIDAD? Sobre mi inducción todo está fluyendo bien, he aprendido nuevas cosas y he demostrado que sí puedo hacer todo lo que me han asignado como las tareas y prácticas, además de demostrar que soy una persona responsable.
¿POR QUÉ ESTUDIAR PSICOLOGÍA? La psicología es la carrera con la cual me identifico, además de que me gusta y me permite desarrollarme, también puedo conocer mejor a las personas y ayudarlas. En la escuela tuve un acercamiento con la psicología y fue cuando hice el curso de “Mediación escolar”, pusieron una pequeña oficina para quienes quisieran ayudar a las otras personas. Entonces me apunté y estaba de mediadora si había un conflicto, cuando un amigo me pedía un consejo yo se lo daba y así.
¿EN QUÉ ÁREA DE LA PSICOLOGÍA TE VES DESARROLLÁNDOTE AL FINALIZAR LA CARRERA? Me gusta la psicología escolar porque creo que me desarrollaría mejor en esa área.
¿CÓMO Y CUÁNDO SUPISTE QUE TENÍAS VISIÓN BAJA? Me di cuenta cuando estaba en tercero de básica cuando mi profesora le comentó a mi mamá que escribía distorsionado. Allá fueron unos especialistas a chequearme y dijeron que tenía problemas de visión porque no podía ver unas letras. Después de ahí mi mamá empezó a llevarme a las ópticas, a hacerme estudios y salí con que tenía baja visión. Ha sido un proceso largo. Al final determinaron que tengo un tumor que afecta mi nervio óptico.
Los doctores han presentado alternativas, pero han sugerido no hacer ninguna intervención porque arriesgo perder la visión totalmente. El proceso es un poco incómodo, pero gracias a Dios no me he dejado caer, nunca me limité porque si una persona bien de salud puede ¿por qué yo no? Entonces yo siempre he pensado así, sí tú puedes yo también, no importa la situación o circunstancias.
¿CÓMO HA SIDO TU PROCESO DE ADAPTACIÓN A LAS CLASES VIRTUALES? Para mí ha sido un poco incómodo ya que es la primera vez con esta experiencia virtual, pero poco a poco me he ido adaptando a las clases y lo he sobrellevado. Ahora estoy aprendiendo sobre computadoras y tecnología con un profesor que viene a mi casa a darme tutorías.
¿UTILIZAS ALGÚN TIPO DE PROGRAMA TECNOLÓGICO PARA LO QUE TIENE QUE VER CON LAS LECTURAS? Para desarrollarme en las clases tengo un programa en la computadora que me va diciendo y leyendo lo que voy haciendo y desarrollando en el día a día de esta carrera universitaria. Para leer tengo un visor y una lupa.
¿CÓMO LLEGASTE A LA FUNDACIÓN FRANCINA HUNGRÍA? Llegué por medio a la Escuela Magali Estrella y de una profesora, Cándida Ortiz, que trabaja en una escuela de personas con baja visión y no videntes. Ella iba mensualmente a mi escuela a darme seguimiento y a enseñarme Braille. Como yo tenía altas calificaciones y ella me acercó a la Fundación Francina Hungría para que siguiera recibiendo apoyo en mis estudios. Esos pasos abrieron una oportunidad en mi vida que no pienso desaprovechar.
¿QUÉ ES LO QUE MÁS VALORAS DE PERTENECER A LA FUNDACIÓN? Lo que más valoro es que gracias a ellos he obtenido mucha ayuda y apoyo. Gracias a ellos conseguí mi beca, una computadora y también me han ofrecido la oportunidad de crecer. Me integré al estudiantado de la Escuela de Liderazgo y Autonomía para jóvenes con discapacidad visual (ELA), me gusta participar de manera activa en los encuentros y en las plenarias, también disfruto mucho el trabajo en equipo.
HÁBLANOS DE TU PLANO FAMILIAR, ¿CÓMO ES LA RELACIÓN CON TUS PADRES Y HERMANOS? Mi relación con mi familia es muy buena, tengo dos hermanos que me ayudan en todo lo que necesito, me quieren mucho y yo a ellos porque quieren que yo sea una persona feliz.