¿Debería todo el mundo estar obligado a reciclar?
Todos nos preocupamos por nuestro futuro y el futuro de nuestros seres queridos. Reciclar no es algo que debas hacer porque eres “verde”, sino que es una responsabilidad que todos debemos cumplir. Es gratis, es fácil y valdrá la pena. Porque, al final, todos nos beneficiamos, y si no hacemos nada, nuestra generación será la que verá las consecuencias de nuestra inacción en tan solo 30 años.
Por: Tamila Naser Fedorchenko/ Estudiante de Medicina
El reciclaje es crucial para nuestro futuro y es la forma más fácil de ayudar a salvar el planeta. El separar, limpiar y depositar los desechos reciclables, puede tener un impacto positivo en el planeta Tierra; ayuda a conservar los recursos, ahorra energía, protege el medio ambiente, y crea empleos. Esta acción contribuye con la economía al generar muchos más empleos que los vertederos y los desechos de las plantas de energía.
También ayuda a preservar los recursos naturales finitos; lo cual es crítico ya que la población está creciendo exponencialmente. Es crucial comenzar a reciclar ahora, porque si no lo hacemos, nuestra generación sufrirá las consecuencias. Si decidimos tomar medidas, somos nosotros los que nos beneficiaremos, no solo al evitar que la Tierra se convierta en un basurero literal, sino al crear empleos y beneficiar a la economía.
El reciclaje no es una idea recién inventada, pero solo ganó popularidad y reconocimiento en los últimos años y ahora está creando miles de empleos a nivel mundial. Según el informe oficial de Recycling Economic Information (REI), en un año, el reciclaje ha creado 757,000 empleos, representó 36.6 mil millones de dólares en salarios y 6.7 mil millones de dólares en ingresos fiscales solo en los Estados Unidos (Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos, 2016).
El impacto del reciclaje en la economía ha sido un enfoque de 30 años del ILSR y en un informe reciente concluyeron que, en comparación con los vertederos y la incineración, el procesamiento de materiales reciclables puede crear entre 10 y 60 veces más empleos dependiendo de la fábrica (Instituto para Autosuficiencia local, 2002). La industria del reciclaje es responsable de ayudar a la economía, pero también es una herramienta que nos ayuda a ahorrar recursos limitados para las generaciones futuras.
Los humanos no han existido por mucho tiempo en este Planeta, pero hemos logrado usar tanto de lo que tiene para dar —que ahora puede que no quede suficiente—, no solo para nuestros hijos y nietos, sino incluso para nosotros mismos. Los recursos finitos como el petróleo, el gas y el carbón tienen millones de años de antigüedad, pero en los últimos 200 años logramos usarlos casi hasta la caída, ya que se prevé que el petróleo y el gas terminen en unos 50 años, y que el carbón en 132 años (Grupo BP, 2020).
El reciclaje de plástico reducirá nuestro consumo de recursos finitos como los mencionados, porque el gas natural y las materias primas derivadas de los procedimientos de gas natural y de la refinación de petróleo crudo se utilizan en su producción (Administración de Información de Energía de EE. UU., 2020). Teniendo en cuenta el pronóstico mencionado y el crecimiento exponencial de la población, tenemos poco tiempo que perder.
Todos hemos visto cómo los desechos terminan en las calles y, en consecuencia, llegan al océano, creando lo que se conoce como parches de basura que se extienden por cientos de miles de kilómetros cuadrados. Si no hacemos nada, lo veremos extenderse más antes de que nos hayamos ido. El Gran Parche de Basura del Pacífico tiene un tamaño de 1,6 millones de kilómetros cuadrados, y el 99% es de plástico (Lebreton, et al., 2018), lo que significa que no existiría si tuviéramos que reciclar. Para el 2050, se espera que el desperdicio global aumente en un 70% (Banco Mundial, 2018), lo que nos dice que veremos estos cambios a lo largo de nuestra vida. Esta estimación se basa en una base de “dejar como está”, por lo que si nosotros, como individuos y como sociedad, decidimos actuar, es posible evitar que todo esto suceda.
Es un hecho que al no hacer nada, los efectos de la eliminación de los desechos malos empeorarán con el tiempo y que los recursos finitos van a terminar, durante nuestra vida, y también es un hecho que el reciclaje puede evitar la progresión de estos dos problemas; mientras que a su vez va creando empleos y beneficiando a la economía. El sufrimiento animal, el sufrimiento de la vida marina y el sufrimiento de las personas, son producto de nuestra inacción. ¿Estamos preparados para verlo escalar? Entendiendo que hay un problema y conociendo la respuesta, todo lo que tenemos que hacer ahora es motivarnos y motivar a otros para que se conviertan en parte de la solución, no del problema. Estoy orgullosa de estar marcando la diferencia, y estoy segura de que tú también puedes.