Anuncios Publicitarios: El dolor de cabeza de los millenials
Con este ensayo el inteciano Elías Jahzeel Matías Villamán, estudiante de Negocios Internacionales, el ganador del primer lugar de INTEC en el concurso FOA Universitario, realizado durante FOA 2018, en el que alumnos de distintas universidades participaron con la redacción de textos de entre 500 y 1000 palabras relacionados a temas de mercadeo y publicidad.
Hoy en día estamos conscientes de que el negocio o compañía que no se sujete al marketing digital y a la publicidad por medio de redes sociales no saldrá a flote, debido a que gran parte de la población actual, en especial los millenials, consumen más de la mitad de su tiempo en una aplicación de su smartphone que en cualquier actividad cotidiana, y prefieren más usar esta vía que mirar un catálogo en físico a la hora de decidir comprar un producto o buscar un servicio.
Sin embargo, algo que se ha convertido en una total molestia para todos los jóvenes ha sido el abuso de los anuncios publicitarios en muchas de las aplicaciones móviles que descargan, dando paso a que muchas veces no se le preste ni la mínima atención a una cartera de productos que tal vez sí podrían beneficiar al observador pero ya teniendo la ante sala de varios anuncios que llegan a ser hasta ¨molestosos¨, el millenial solo cierra el app y espera que la publicidad desaparezca.
Este fenómeno no solo crea un sentimiento de incomodidad en la ciber población consumista, sino que genera pérdidas monetarias a todas esas compañías que no logran sus objetivos al poner sus anuncios tantos en aplicaciones de juegos, editores de fotos, hasta en aplicaciones de chat alternativos. Entonces surge la interrogante: ¿Cómo se podría lograr llegar a un balance entre ambas partes, beneficiando así a que los propietarios de estas compañías llegan al público joven sin hacer que estos perciban la publicidad como abrumadora y repetitiva?
En primer lugar hay que conocer el mercado. Dirán que es algo básico que ya toda persona en el mundo del marketing y publicidad conoce de antemano, pero más allá de un simple concepto. No solo se trata de conocer al que mercado te diriges, sino de saber cuál o cuáles grupos además de tu clientela estrella pueden ver tu publicidad, saber buscar el lugar correcto para el mercado correcto de la publicidad, en específico, saber en qué lugares de las redes se deben colgar los anuncios para que no sean ignorados por las personas que lo vean, sino que se logre llamar tanto al público deseado como a nuevos clientes.
Luego deberíamos saber cómo reinventar la publicidad en línea, buscar nuevas estrategias y maneras de crear los anuncios de Internet, que no sean siempre de la misma forma con los mismos modelos y diciendo las mismas frases o usando las mismas imágenes, esto es el principal factor por lo cual los millenials ignoran gran parte de la publicidad, por ser repetitiva y monótona, lo cual hace que lleguen a un punto de que ven la primera parte ya sepan cómo va a terminar un anuncio, sin que los motive a indagar más o se interesen en comprar o adquirir lo que se promociona.
Cuidar el tiempo
Por último, el tiempo de presentación de los anuncios. Toda persona que tiene aplicaciones gratuitas entiende el hecho de que habrá publicidad de otras apps o de varias marcas cubriendo lo que se debería pagar por la adquisición del servicio usado, pero lo que incomoda no es el hecho de esta publicidad, sino es el tiempo que se toma el anuncio en la pantalla. Esto es lo que hace que casi todo usuario salga de la app y se pierda la publicidad, ya que no desea ver anuncio repetitivo de 30 segundos o más en su pantalla o que se ponga cinco veces en menos de una hora. En lugar de seguir realizando esto, esas publicidades se pueden mejorar haciéndolas más cortas, con lo que se logra que la persona que esté, ya sea en la aplicación o en la página web, decida observar el anuncio, en primer plano para seguir en las actividades que realizaba, pero luego se logra captar su atención y de esta manera obtener un nuevo cliente.
Queda en claro que los millenials tienen un gran poder adquisitivo y de control de las masas en la actualidad, y lograr que estos no se sientan agobiados con los anuncios que se le presenten, en cambio, que se procure que a estos les llamen la atención y ellos mismo decidan compartirlo con otros grupos no necesariamente de su rango de edad, hará que la publicidad fluya de manera natural y se logren los resultados esperados, además de que siempre se ha dicho que “el mejor marketing es el que no parece marketing” y esto es un ejemplo más que comprueba la veracidad de este gran enunciado.